Estamos agradecidos por la generosidad de las personas, fundaciones y corporaciones que nos proveen un continuo apoyo para cuidar de los manatíes bajo nuestro cuidado y continuar desarrollando los diferentes programas científicos y de conservación.
Su generosidad y apoyo nos ha permitido continuar con la prestación de cuidados críticos para los manatíes huérfanos y heridos a la vez que documentamos para la ciencia la biología e historial de vida de estas especies en peligro de extinción. La expansión de nuestro Centro con instalaciones nuevas también se debe a su apoyo y ayuda financiera.
Amigos del manatí
Mensaje de Nicole Gutierrez, voluntaria del Centro de Conservacion de Manatíes, a nuestros auspiciadores
Buenos días. Mi mensaje esta dirigido a ti…a cada uno de ustedes.
Estimado forjador de este sueño hecho realidad: A nombre de los estudiantes, voluntarios y técnicos del Centro de Conservación de Manatíes, le doy las más expresivas gracias por haber contribuido a la construcción de este Centro, que no tan solo es el hogar del manatí, si no de todos nosotros, estudiantes como yo, quienes damos de nuestro tiempo de forma voluntaria para su funcionamiento día a día.
Desde niña soñé con estudiar la naturaleza y sus seres para entender, cuidar y proteger los animales marinos. Hoy gracias a tu apoyo y contribución, puedo compartir con mis compañeros estudiantes y voluntarios y con ustedes como socios en la conservación, este deseo convertido en realidad.
Más que aprender datos y datos, importantes todos, sobre el funcionamiento biológico de los animales y plantas, en este Centro he aprendido a EXPLORAR más allá y a aplicar directamente estos datos científicos para un propósito mayor, PROTEGER y CONSERVAR a aquellos que por los mismos seres humanos no están sobreviviendo muy bien. Cualquier semejanza de sobrevivencia con nuestra propia especie es pura coincidencia, o quizás no.
En este Centro he aprendido a ABRAZAR la vida. Lo hacemos aquí con los manatíes, pero se extiende a toda la naturaleza, se extiende a nosotros mismos. He aprendido a AYUDAR a los seres vulnerables. A RESCATAR a los que estan necesitados y se baten entre la vida y la muerte. Este Centro es un laboratorio en el que recibimos seres vivientes para cuidar las cicatrices productos del descuido de nuestro rol como custodios del planeta. En este Centro hemos aprendido a EDUCAR, recibiendo niños y jóvenes que quieren saber como hacer la diferencia en pro del ambiente. Niños y jóvenes que, como yo, también quieren ser biólogos marinos, veterinarios y científicos. Todo esto, al final, me ha enseñado a AMAR. A amar la naturaleza, a amar nuestro entorno, nuestro hábitat. A amar a los manatíes, ¿por qué no? A amar a todos los seres humanos. A amar a Puerto Rico.
Tu te has convertido en un forjador de sueños. En mi sueño. En el sueño de todos los que trabajamos aquí en el Centro. El sueño de lanzarse al mar a rescatar a una de estas sirenas cuando una lancha a velocidad con un conductor con tres palos encima le ha robado de la facilidad de subir a la superficie a respirar. El sueño de lanzarse a un estanque a las 6 de la mañana con agua friiia, por nuestro clima de diciembre y enero, para darle un biberón a un pequeño manatí que quedo huérfano a los tres días de nacido. El sueño de volvernos a lanzar al agua de mar para cortarle la correa del transmisor de satélite a un manatí porque ya pasó la prueba y esta adaptado nuevamente a su medio ambiente costero.
Y en esto, te has convertido también en un forjador de jóvenes que cuando se quiten su wetsuit, siguen mojados…siguen empapados de bondad, responsabilidad social y esperanza de vida. Por eso te damos gracias.
Recuerda siempre los ocho verbos, conjugados en presente indicativo, que nos sirven como guía. Hazlos parte de tu vida, como nosotros lo hemos hecho. Promuévelos en tu entidad, en tu empresa, en tu oficina, en tu aula. Promuévelos en tu hogar: EXPLORA, RESCATA, AYUDA, PROTEGE, CONSERVA, EDUCA, ABRAZA y AMA.
De parte de todos nosotros, gracias por tu apoyo.
