Por Gerardo E. Alvarado León  (Noticia Original)

En un hecho que confirma que el venenoso pez león se pasea sin problemas por las tibias aguas locales, tres personas -entre ellas una niña de 12 años- han sido pinchadas por la especie en los pasados tres meses, informó ayer el Centro para el Control de Envenenamiento del Departamento de Salud.

El suceso más reciente ocurrió el pasado 12 de mayo en la playa de Punta Salinas, en Toa Baja, donde resultó afectada una fémina de 27 años, informó la enfermera educadora del Centro, Elba Hernández Carmona.

El biólogo Antonio Mignucci, director del Centro de Conservación de Manatíes, abundó que se trató de una técnico de dicho ente que fue pinchada por un pez león mientras monitoreaba al manatí Tuque, recientemente liberado en una playuela de Punta Salinas.

“Estuvo en el hospital durante 18 horas con dolor intenso”, dijo Mignucci.

Hernández Carmona precisó que los otros dos casos corresponden a una niña de 12 años y a un hombre de 19. La niña resultó afectada el 19 de marzo en una playa de Dorado, mientras que el incidente del hombre ocurrió el 1 de marzo en una playa de Fajardo.

“Además de dolor intenso, los síntomas incluyen hinchazón, náuseas, entumecimiento, dolor en las articulaciones, ansiedad y dolor de cabeza”, dijo Hernández Carmona.

El veneno puede ser mortal si el paciente es alérgico, no se atiende a tiempo o está inmunocomprometido.

De las 3,217 llamadas que hasta ayer había recibido el Centro, 56 son de envenenamiento por mordeduras o picaduras de animales. Tres están asociadas al pez león. El año pasado, según la experta, no se recibió ninguna.

Hernández Carmona hizo un llamado de prudencia a los bañistas, sobre todo a que usen zapatos de goma y recuerden que el veneno del pez león está activo de 24 a 48 horas tras su muerte.

De otra parte, Craig Lilyestrom, director de la División de Recursos Marinos del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), indicó que la agencia descartó la idea de incentivar económicamente a los pescadores comerciales para que atraparan correctamente al pez león.

“Cuando se acaben los fondos, se acaba la colaboración de la gente”, dijo.

En su lugar, el DRNA elabora un plan de manejo del pez león que incluye la adquisición de materiales de captura que se distribuirían gratuitamente entre los interesados en atraparlo.

“Estamos en el proceso de identificación de fondos”, contó Lilyestrom.